Cocaine Bear u Oso Intoxicado (como decidieron ponerle en México) es una película que desde su anuncio llamó la atención del mundo, que rápidamente la convirtió un meme popular, tomando en cuenta la curiosa temática que esta historia presentaba. Y es que ya hay bastantes largometrajes que tienen como protagonistas a animales asesinos, pero nunca uno que sea adicto a las drogas como este…
Así pues, Oso Intoxicado es una historia basada en hechos reales, que aunque exagerados en demasía, resultan curiosos al saber que un acontecimiento parecido verdaderamente ocurrió en esta realidad. La primicia arranca con un grupo delictivo que busca transportar algunos kilos de cocaína por el mundo en avionetas y siguiendo un curioso modus-operandi en el que el cargamento debe ser tirado en puntos específicos, donde otro equipo será quien finalice la arriesgado misión; no obstante algo sale mal en la operación y muchos kilos del delirante químico terminan en el estómago de un enorme oso negro.
Con lo anterior en cuenta, esta divertida cinta se ubica dentro del género de los slasher, lo cuál resulta bastante hilarante tomando en cuenta que hace pocas semanas se estrenó también Winnie The Pooh: Miel y Sangre, donde el protagonista es un oso que va por el bosque asesinando gente, de maneras distintas, pero las coincidencias están ahí. ¿Será que este 2023 es el año del oso?
Continuando con lo mencionado, Oso Intoxicado posee un montón de momentos que en su mayoría te mantendrán entretenido, así vayas solo o acompañado, ya que desde el primer momento la dirección de la historia te deja claro que no debes tomarte nada de lo que verás en serio. Porque la película está hecha para relajarse, desconectar por casi dos horas y deleitarte con un espectáculo sanguinario como pocos en el que verás degollamientos, balaceras, heridas profundas y sobre todo, mucha acción salvaje en un bosque de Georgia, Estados Unidos.
Como era de esperarse y a pesar de que es una producción respaldada por Universal Pictures, en muchas ocasiones te sentirás ante una cinta de Serie B y las actuaciones, efectos, diálogos e historia representan una total parodia del género que representa. Aunque eso sí, también posee características puntuales, como persecuciones, un par de scare jumps y clichés por doquier, además de la más ridícula aventura desenfrenada que presenciarás en toda tu existencia.
Eso sí, es importante recalcar el hecho de que si vas buscando una cinta llena de actuaciones de Oscar, guión coherente o un trabajo a la altura de otras superproducciones de Hollywood, seguramente terminarás muy decepcionado. Oso Intoxicado es uno de esos proyectos que a la gente que se toma en serio este medio de entretenimiento va a odiar, principalmente porque no satisface ninguno de los estándares actuales que la crítica toma en cuenta para colocarla en lo más alto de su juicio.
De igual forma y aunque la trama es lógica consigo misma, es posible darse cuenta de que de “hechos reales” tiene poco, asemejándose a la historia real en el concepto básico únicamente, pero tomándose libertades creativas para poder dar forma a un producto que seguramente dará pie a un posible universo conectado de animales adictos, como ya lo ha declarado su directora Elizabeth Banks y de manera particular espero fervientemente que le vaya bien en taquilla para que termine por materializarse.
En conclusión, Oso Intoxicado (Oso Crick-oso para la banda), es una película divertida y sanguinaria que se toma un montón de libertades creativas para contar una historia que, sin tener el mejor guión de Hollywood, ni actuaciones dignas de premiación y mucho menos efectos visuales de infarto, es suficientemente entretenida para considerarse digna de la gran pantalla. Y es que sí, un largometraje de este estilo seguramente será odiado por la crítica pero amado por el público, que finalmente es a quien va dirigido el cine y por el que espero se logre crear un universo de criaturas adictas en un futuro cercano.
